domingo, 1 de septiembre de 2013

Toc, toc, ¿se puede?

Tras un verano lleno de cambios... Creo que esa es la definición de todo esto. Me explico. Llegó un momento en el que este espacio de literatura para compartir, se me hizo ínfimo, chiquitito, y una valla por la que saltar. Y tuve que sacar mi lado más radical de dejar todo hacia un lado, salir corriendo por un tiempo, y pensar durante el trayecto si me apetecía volver o no. Sí, apetecer.

Esa parte extremista también llevaba consigo el verbo cambiar. Cambiar en todo lo que se pudiera. (Ahí, ente medias, también se ha escondido por un rato la palabra huir). Y como siempre hay que empezar por algo, comencé por la parte a la que más cariño le tengo, y esa es la literatura. Lo dicho, el blog parece distinto. Y digo parece porque lo único que ha cambiado de momento es la interfaz, el diseño, el título... (Mejor no preguntéis de dónde salió: un ataque de ''inspiración'', mezclado con muchas sopas de letras).

Lo que queda por evolucionar se encuentra en estado de gestación. La esencia de Wonderwall se conserva, dejando de lado, eso sí, algunas mariposas que se colaron en primavera. (Esas están en proceso de extinción). Los sueños siguen siendo de color azul. La inocencia le ha pegado un buen tajo a su melena...

Espero que este siga siendo un espacio donde dar rienda suelta a ese monstruo creativo de boli y papel, de palabras que esperan impacientes y que, más tarde, se digitalizan para acabar aquí.

Y digo yo, qué buenos esos finales que se camuflan de principios... ¿verdad?

Alba Rubio.


2 comentarios:

  1. por un momento me asustaste, pensé que ibas a decir algo así como se cierra este blog -no te atrevas-. Cambiar es crecer, mantener la esencia es seguir naciendo.

    esperamos lo que venga

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    1. No se me pasó la idea en sí, pero sí pensé en dejarlo de lado durante un período de tiempo, lo suficiente para que se aclarasen algunas ideas. Y quién iba a decirme que un verano bastaría para volver a encajar algunas piezas, y conseguir fuerzas para construir otras tantas nuevas. Así que, de momento, la feliz acción de escribir se mantiene. (Y espero que siempre en un continuo cambio, si eso significa crecer).

      Agradezco mucho tu paso por este blog.
      Un abrazo :)

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